Jazmín Renzi sabe lo que es intentar cumplir con todo: ser madre reciente, tener que volver al trabajo, tener la exigencia de “rendir”, y no dormir. Años atrás, en medio de este desborde y con apenas cuatro horas de sueño por noche, comenzó a buscar respuestas. Lo que no imaginaba era que, de esa búsqueda, nacería Vuelta al Trabajo, un proyecto que desde su lanzamiento ya acompañó a más de 100 familias en la organización del sueño de sus hijos, y que hoy representa una propuesta pionera en Córdoba.
La historia de esta iniciativa nace, como muchas otras, de una experiencia personal. “Mi hijo tenía cuatro meses, no dormíamos, y yo debía volver a la oficina. La angustia y el cansancio me sobrepasaban”, cuenta Jazmín en diálogo con CBA Viva. En ese entonces ella trabajaba en marketing y no tenía ningún vínculo con el mundo de la crianza o la consultoría en sueño infantil. Pero eso ya cambió. De buscar ayuda en internet pasó a formarse y terminó certificando como consultora en sueño infantil.
Hoy, junto a su emprendimiento Vuelta al Trabajo, acompaña a madres, padres y cuidadores que están atravesando el regreso al trabajo con bebés pequeños. ¿El objetivo? Que esa transición no sea un salto al vacío, sino un proceso ordenado, acompañado y posible. De necesitar sostén pasó a convertirse en sostén para otras familias.
Un modelo que integra lo emocional, lo práctico y lo laboral
La propuesta tiene un enfoque integral: combina asesorías en sueño infantil, lactancia y productividad personal. Y en este desafío Jazmín no está sola. La acompañan Gabriela Alterio, puericultora especializada en lactancia, y Roxana Ochnicki, consultora en desarrollo organizacional y liderazgo. Juntas ofrecen herramientas concretas para que las familias recuperen el descanso, la rutina y el equilibrio entre lo personal y lo laboral.
“Hasta ahora, había espacios que abordaban estos temas por separado. Lo que buscamos con Vuelta al Trabajo es una mirada completa. Porque volver al trabajo después de tener un hijo no es solo cuestión de horarios, también es una reconfiguración emocional, de vínculos, de objetivos”, explica.
Y no solo acompaña a familias. También comenzaron a trabajar con empresas interesadas en generar políticas reales de conciliación: “Muchas veces se naturaliza que si tenés un bebé no dormís, pero eso afecta directamente al rendimiento laboral. Las empresas también tienen que empezar a mirar ese proceso de regreso con más empatía y preparación”.
Emprender desde el caos (y con conciencia)
Emprender nunca es simple. Pero hacerlo desde una transformación personal y romper con el modelo de relación de dependencia implica un plus de valentía. Jazmín lo sabe. “Sin dudas, lo más difícil fue animarme. Emprender te enfrenta a tus propias creencias, a la incertidumbre económica, a tomar decisiones sola. Es un trabajo emocional constante”, cuenta.
Desde su experiencia, reconoce que una de las barreras más desafiantes fue confiar en el valor que su propuesta tenía para otras personas: “Tuve que aprender a ponerle precio a un servicio que, además de práctico, tiene un impacto emocional enorme en las familias. No es fácil cuantificar eso, pero es parte del camino”.
Hoy, aunque gestiona el proyecto de forma autónoma, reconoce la importancia de pedir ayuda, rodearse de colegas y apoyarse en herramientas como la tecnología. “Es clave no quedarse sola. Aunque emprendas sola, necesitás red, otras miradas, y también espacio emocional para sostener todo lo que implica crear algo propio”.
Consejos para emprender desde el deseo (y no desde la perfección)
Para quienes están pensando en lanzarse con un proyecto propio, Jazmín tiene tres consejos que considera “claves” en este proceso:
- Creer en tu idea. Parece básico, pero no lo es. Sostener una visión cuando la economía tiembla o cuando las dudas personales aparecen requiere convicción y trabajo interno.
- Pedir ayuda. Nadie emprende completamente sola. Buscar apoyo profesional, emocional y técnico es parte del proceso.
- Animarse a salir “en beta”. Antes creía que todo tenía que estar perfecto para lanzarse. Hoy aprendió que hay que salir caminando, probar, ajustar y seguir. “La flexibilidad es fundamental”, dice.
En Córdoba, existen propuestas que trabajan aspectos como la lactancia, el sueño infantil o la crianza en general. Pero no hay otra que los reúna en una única experiencia. Ese es el diferencial de Vuelta al Trabajo. Y también el motor que empuja a Jazmín cada día: demostrar que la maternidad y la paternidad pueden convivir con el trabajo de una forma más humana, ordenada y respetuosa. Porque criar no debería vivirse “a las corridas”. Y porque descansar también es criar.
Contacto
¿Querés conocer más sobre este proyecto? En Instagram los encontrás como @vueltaaltrabajo o podés gestionar un turno presencial en Natale Gym (Tristán Malbrán 4011, Córdoba Capital).